El objetivo principal de este grupo de trabajo fue dar a
conocer la visión y el papel de las empresas en la conservación de la
biodiversidad, además de abrir un debate entre los diferentes sectores de la
sociedad española, desde administraciones, ONG’s y otro tipo de organizaciones
e instituciones científicas, con el fin de definir una serie de estrategias que
consigan paliar las pérdidas de biodiversidad y capital natural.
Mediante la pregunta: “¿os
imagináis si las abejas deciden ponerse en huelga”?, Sonia Castañeda nos
introducía en el binomio empresa y biodiversidad, definiendo este último
concepto no sólo como el conjunto de especies, ecosistemas, variabilidad
genética… sino como todo aquello que necesitamos para tener vida y bienestar
social. Por otro lado, se enfatizó la existencia del vínculo entre economía y
biodiversidad, de manera que “la pérdida
de biodiversidad representa el 7% del PIB mundial anual”, como apuntaba la
directora de la Fundación Biodiversidad, y como este hecho supone un motivo de
preocupación para las empresas ya que les afecta directa o indirectamente a su
actividad y, en ocasiones, puede amenazar sus operaciones comerciales; aunque,
como se remarcaba al inicio de esta jornada, la biodiversidad sigue siendo la
gran desconocida de las empresas y uno de los principales inconvenientes es que
esta se halla invisibilizada en la economía.
Seguidamente, Amanda del Río (Fundación Global Nature) nos
recordaba los objetivos principales de este grupo de trabajo además de
enfatizar la importancia de comunicar e informar acerca de este ámbito. Así
pues, los objetivos del grupo de trabajo se definieron y describieron mediante:
1.- La recopilación
de datos y hechos sobre la relación entre empresas y biodiversidad.
En este sentido, se analizó la relación del PIB y de las
empresas y de la situación actual de la gestión empresarial de la
biodiversidad, mediante el producto del análisis del PIB de España y las
principales causas de la pérdida de biodiversidad. Además de la revisión del
marco legislativo, los incentivos y la fiscalidad.
2.- La realización de
una encuesta sobre la percepción en España de “Empresas y Biodiversidad”.
Iván Albertos (CEOE) realizó una breve descripción de la
naturaleza y resultados de dicha encuesta, dándose a conocer así, por un lado,
la percepción de las empresas sobre la biodiversidad y, por otro, la percepción
del tercer sector sobre la integración de la biodiversidad en la gestión
empresarial y el papel como ONG.
Encuesta online: www.empresaybiodiversidad.org
3.- La documentación
de buenas prácticas de empresas que integran la biodiversidad en su gestión o
que de alguna manera destacan en su forma de tratar esta variable (más de 60)
En primer lugar, Javier Zabala y Álvaro Velasco de Iberdrola,
describían el proyecto BIOVALORA, como una “oportunidad
para evaluar las aportaciones ambientales y socioeconómicas de las
instalaciones de la empresa, con una serie de aportaciones en forma de
conservación de la biodiversidad y prevención de daños ambientales, además de
medidas de prevención”, mediante el proyecto PRIMA. Y, por otro lado, el enfoque
Ihobe, mediante la plataforma “Basque Ecodesign Center.”
Posteriormente, la intervención de Ana Herrero (Heineken) se
centró en el “Proyecto para el desarrollo de actuaciones para la conservación
de fauna amenazada en la comunidad autónoma de Andalucía”, cuyo objetivo es “extender el área de actuación a zonas que
quedaban fuera del ámbito de actuación”, y cuyas herramientas de
conservación principales se corresponden con prácticas agrarias y conservación
de aves esteparias, como la avutarda común, especie en peligro de extinción.
Álvaro Camiña (ACRENA), mediante el proyecto europeo “GP
WIND”, destacaba la integración de la Biodiversidad en el sector eólico (www.project-gpwind.eu,
www.equator-principles.com).
Por último, Arantxa García Lis (TUI), ejemplificaba esa “búsqueda de mejores maneras de realizar las
tareas del sector turístico sin afectar a las especies autóctonas de una
determinada zona.”
Finalmente, una serie de intervenciones fueron describiendo
un número de casos empresariales por la biodiversidad: la Red de Custodio
Alzando el Vuelo (SEO), como proyecto muy participativo que incorpora el
concepto de custodia del territorio y que participa en la conservación del
águila imperial ibérica; Tamara Guzmán nos recordaba que “dar una segunda vida a las canteras es posible y que “la minería podía ser una oportunidad en
términos de biodiversidad”; Entorno Producciones y Estudios Ambientales
desde el fomento de la biodiversidad de polinizadores en actividades
productivas; la empresa Heligemas ligaba la conservación de una especie
endémica (Iberus Gualtieranus) con su
comercialización; desde ACCIONA se aportaban mecanismos de conservación del
aguilucho cenizo; Abella Lupa, la apicultura como vehículo de comunicación para
transmitir la importancia de la biodiversidad especialmente en espacios
protegidos; Ecomilenio, una evaluación de ecosistemas en España que incide en “la relación entre el estado de los
ecosistemas con el bienestar humano”; Iberdrola y la protección y
seguimiento de culebras con radioemisores; REWE, comercialización de legumbres y
conservación de aves esteparias, oso pardo…
En cuanto a las líneas del debate, estuvieron centradas en
el refuerzo de los instrumentos estratégicos y la creación de una economía
alrededor de la biodiversidad, así como proyectos más ambiciosos en aras de la
conservación de la biodiversidad y la relación Red Natura 2000 – PAC (Abella
Lupa); el papel de las empresas en políticas ambientales y la importancia de la
comunicación debido a la pérdida de confianza, búsqueda de soluciones
innovadoras entre todos (REWE); y en la mayor implicación y colaboración entre
las diferentes empresas, administraciones y entidades para poder alcanzar los
objetivos marcados presentes y futuros en la conservación y protección de la
biodiversidad.
Resumen realizado por: Cristina Martín Camacho (Twitter: @Cristina_MC_ ; e-mail: c.m.c_mad@hotmail.com)
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