1. Calidad del aire en España
Se está elaborando la Nueva Directiva de la mejora de calidad del aire que engloba la Ley 34/2007 que fija las competencias de gestión y evaluación de los contaminantes del aire elaborando una zonificación del territorio, la Directiva 2008/50/CE, que obliga la evaluación de las PM2,5; y unifica los Reales Decretos 1073/2002, 1796/2003 y 812/2007.
Los retos de la nueva directiva son el establecimiento de una nueva estructura de redes, la representatividad de las estaciones, nuevos métodos de referencia y nuevos requisitos de los equipos de medición. En 2020, los niveles de PM2,5 han de verse reducidos en un 20%.
La gestión de la calidad del aire pretende una concienciación política y social, que puede verse incrementada por las asociaciones ecologistas.
La información obtenida ha de ser tanto a nivel público como entre administraciones. A nivel público con la obtención de datos a tiempo real con la aplicación de las nuevas tecnologías. Entre administraciones los datos pueden ser cruzados por el SEIVP y estableciendo medidas de ejecución.
En cuanto a la nueva acreditación de los equipos de la medición de gases para el cumplimiento de las normas UNE-EN deben ser acreditados por el organismo designado por la norma 17025 según la Directiva 2008/50/CE.
En España no se puede obtener esta acreditación ya que sus equipos no cumplen los requisitos establecidos en las normas actuales a cerca de SO2, CO y O3; mientras que en otros países de Europa encontrándose en la misma situación, los laboratorios sí se encuentran acreditados.
2. El reto de las zonas urbanas
La contaminación atmosférica en los centros urbanos se corresponde principalmente a emisiones de NO2 Y PM10, siendo su causa principal el tráfico rodado. En España, los altos niveles de contaminantes en zonas urbanas respecto a las emisiones del resto de países europeos, se debe a la gran densidad de turismos por km2 y a la elevada dieselización de la flota de turismos española, siendo un parque automovilístico relativamente joven. Los turismos diesel son los principales emisores de NO2. En 2015 se prevé una disminución de los NOx y los valores de NO2 serán similares a los de los años 90 si los vehículos son del tipo EURO6.
La situación económica ha propiciado un descenso en los niveles de contaminantes, lo que la hace una situación óptima para producir mejoras ambientales y de concienciación para el futuro.
A corto plazo, las estrategias más efectivas son las no tecnológicas como son las zonas de bajas emisiones y el establecimiento del peaje urbano. Las soluciones técnicas se emplearían como complementarias a las anteriores.
A medio plazo, hay que establecer nuevos criterios urbanísticos que impulsen un acuerdo de ciudad que facilite la agilidad necesaria en la implementación de medidas y que garantice su estabilidad, controlando las sinergias y antagonismos de los contaminantes.
La política de seguridad vial puede influir en las políticas de movilidad sostenible mediante aplicación de estrategias como el carnet por puntos. Los objetivos de la DGT es la incorporación de 1.000.000 de ciclistas más, sin que aumente su tasas de mortalidad y que no se produzcan fallecimientos en zonas urbanas de los ocupantes de turismos.
Para aumentar la movilidad, se están elaborando planes de control de velocidad, promoviendo el uso de coche compartido y la creación de carriles BUS-VAO en la red estatal.
Eva Ortega Riege
Paula Laguna de Miguel
No hay comentarios:
Publicar un comentario